Beneficios de trabajar con personas con diversidad funcional
En este mundo en rápida evolución, no sólo la medicina, la tecnología y la ciencia mejoran la vida de las personas, si no que nuestra sociedad se está abriendo a un enfoque más inclusivo de la diversidad.
La diversidad conoce muchas formas diferentes: desde la diversidad étnica, de género, religiosa y de clase hasta la discapacidad. En este artículo, analizo la diversidad en el trabajo. Explico la importancia y los beneficios de incluir a las personas con discapacidad en los trabajos habituales, más concretamente las ventajas de incluir a una persona con síndrome de Down en un equipo, basándome en mi propia experiencia de trabajo con un compañero que tiene síndrome de Down.
Antes de explorar la diversidad en el trabajo mediante el estudio de la discapacidad mental, quiero tocar la diversidad en el lugar de trabajo en un sentido más amplio:
«La diversidad en el lugar de trabajo es comprender, aceptar y valorar las diferencias entre las personas» (Bremer 2020).
Se presta mucha atención a las diferencias visibles entre las personas: edad, etnia, género, etc. Pero a menudo permanecen olvidadas las diferencias invisibles entre las personas; una discapacidad mental puede ser una de ellas.
Un ejemplo de la importancia de la diversidad en las organizaciones es el desarrollo de la herramienta Diversity Atlas, un programa desarrollado por Cultural Infusion que mide la diversidad interna sobre la base de parámetros clave (origen étnico, país de nacimiento, idioma y cosmovisión/religión).
La medición de la diversidad en una organización es útil por varias razones. Al conocer cuán diverso es un equipo, se pueden organizar las actividades adecuadas de formación de equipos. Las políticas pueden ajustarse mejor a las necesidades individuales de los empleados, como por ejemplo las vacaciones flexibles. Disponer de un índice de diversidad puede ofrecer una comparación de la diversidad en diferentes departamentos y empresas, mostrando la evolución a lo largo de los años.
Otro beneficio de conocer la diversidad en su empresa se encuentra en lo que Martin Plowman de Cultural Infusion llama «mutualidad«; la coincidencia entre la diversidad vista en la organización y la comunidad. Esta coincidencia es importante por varias razones: para crear productos/servicios/leyes que respondan a las necesidades, pero también para enviar el discurso correcto a la sociedad: las personas de grupos minoritarios también pueden lograrlo.
Nuestros cuerpos están diseñados físicamente para tener un termómetro interno; cuando nos enfriamos demasiado, automáticamente empezamos a temblar y cuando nos calentamos demasiado, empezamos a sudar. Desafortunadamente, nuestras mentes carecen de tal termómetro; a menudo nos sobrecalentamos sin darnos cuenta y seguimos trabajando, a veces incluso generando un burn-out. No es un fenómeno exclusivamente personal: los grupos suelen experimentar el mismo fenómeno, ya que la tensión que pasa desapercibida puede aumentar en los hogares, en los grupos de amigos y en las oficinas.
Durante la investigación de mi tesis, trabajé con KMZERO, un centro de innovación abierta con sede en Valencia. Uno de los miembros del equipo, Salva, nació con el Síndrome de Down.
Salva trabaja como asistente en la empresa y es responsable de muchas tareas como la preparación de la sala de reuniones, la jardinería, preparar café, ayudar con el envasado y así sucesivamente.
En una conversación, uno de los miembros del equipo me habló de una experiencia de trabajo con Salva.
Durante unos meses de fuerte carga de trabajo, la tensión en la oficina aumentó lentamente y nadie del equipo lo notó hasta que Salva lo mencionó. No fue tímido para expresarse y comunicó al equipo que la tensión le estaba afectando. La reacción de Salva ayudó a los colegas a ponerse en contacto con ellos mismos de nuevo.
Además de aportar buenas vibraciones al lugar de trabajo y ayudar a que el equilibrio entre trabajo y diversión se mantenga saludable, hay muchas otras ventajas de incluir a una persona con Síndrome de Down en un equipo. Las personas con síndrome de Down son conocidas por ser puntuales y motivadas y sobresalen en pensar fuera de la caja. Esto último es especialmente importante en el mundo actual, que cambia rápidamente y en el que se valora mucho la creatividad.
Con este artículo, espero animar a los empleadores a que consideren la posibilidad de pensar fuera de la caja para mejorar sus entornos de trabajo. Las personas con una discapacidad mental pueden ser increíblemente valiosas en el trabajo de muchas maneras diferentes.
Tener un colega con una discapacidad mental como el Síndrome de Down no sólo es beneficioso a nivel organizacional, sino que también mejora su calidad de vida a nivel personal o micro. El trabajo les permite darse cuenta de que son un miembro productivo de la sociedad. En el nivel social o macro, también vemos claramente los beneficios. Estamos pasando de la «vieja» forma de percibir y tratar a las personas con discapacidades mentales como una anormalidad marginada a un enfoque inclusivo en el que son percibidas y tratadas como miembros valiosos de nuestra sociedad.
Desafortunadamente, muchos profesionales de la salud mental se centran únicamente en los síntomas y no reconocen la importancia del trabajo cuando tratan a una persona con una discapacidad mental (Evans y Repper 2000). Sin embargo, el cambio de paradigma que mencioné en el párrafo anterior está acelerando un cambio en este «enfoque de los síntomas» de los profesionales de la salud mental.
El modelo de discapacidad social y de acceso (Perkins y Repper 1996) se aleja de la perspectiva tradicional en la que se «cambia» a las personas para adaptarlas al lugar de trabajo. Más bien adapta el lugar de trabajo a las necesidades y habilidades de la persona. A menudo estos cambios pueden hacerse a través de pequeños ajustes como informar al equipo y dar la orientación adecuada para apoyar al empleado con una discapacidad mental.
La orientación correcta es importante para cada empleado. Esta orientación es a menudo ofrecida por el departamento de recursos humanos de una empresa, pero cuando se considera la posibilidad de contratar a un empleado con una discapacidad mental, una orientación adicional puede ser útil en muchos casos.
Asindown es una organización valenciana sin ánimo de lucro que ofrece ayuda a las personas (y a las familias de las personas) con discapacidades mentales en todas las fases de la vida. Su principal objetivo es trabajar en pro de una sociedad inclusiva en la que cada miembro se sienta cómodo y valioso. La orientación comienza a una edad temprana con sesiones de terapia de atención. De esta manera, muchos niños con discapacidades mentales pueden incorporarse a la educación general. Después de graduarse en la escuela, se ofrecen proyectos especiales con el fin de preparar a los candidatos cualificados para entrar en el mercado laboral. Gracias al enfoque personal del equipo, los niños son capaces de desarrollar los talentos y habilidades que son útiles para el trabajo que más les conviene. Asindown también tiene un departamento que sirve de mediador entre las empresas y los candidatos a un puesto de trabajo. Al principio del empleo, Asindown ofrece una orientación cercana que se reduce lentamente a reuniones mensuales. Esto facilita que el empleado trabaje de forma independiente, rodeado de una red de apoyo que siempre puede ser consultada.
Con este artículo, espero animar a los reclutadores y empleadores a que consideren la posibilidad de pensar outside the box para mejorar sus entornos de trabajo. Las personas con una discapacidad mental pueden ser increíblemente valiosas en el lugar de trabajo de muchas maneras diferentes; desde mantener un equilibrio saludable entre trabajo y diversión hasta ejecutar las tareas de manera rigurosa. Organizaciones como Asindown demuestran que tener una discapacidad mental no necesariamente convierte a alguien en discapacitado. Las personas con discapacidades no son anormales, es el mundo el que las etiqueta de esta manera. Por esta razón, es importante tener una política de diversidad inclusiva en las empresas. Al contratar a una persona con discapacidad, se produce un impacto a nivel micro, meso y macro. Gracias a organizaciones como Asindown, muchos jóvenes con discapacidades mentales pueden incorporarse a la educación general, los graduados pueden encontrar un trabajo y los adultos pueden vivir de forma independiente.
Todo lo que necesitan es una oportunidad y la orientación adecuada.
Bibliografía
Evans, J., and J. Repper 2000 Employment, Social Inclusion and Mental Health. Journal of Psychiatric and Mental Health Nursing 7(1): 15–24.
Perkins, R, and J Repper 1996 Working Alongside People With Long-Term Mental Health Problems. London: Chapman & Hall.
Stein, L.I, and A.B Santos 1998 Assertive Community Treatment of Persons with Severe Mental Illness. New York: Norton.